Hoy viernes 16 de febrero se conmemora el 45 aniversario de la muerte en las montañas de nuestra Quisqueya, de Francisco Alberto Caamaño Deñó, aquel Coronel que con su acción heroica encabezó la gesta constitucionalista de abril de 1965 que demandaba la restitución del gobierno Constitucional del profesor Juan Bosch derrocado el 25 de Septiembre de 1963.
El Coronel Caamaño, fue aquel valiente dominicano, que siendo Presidente Constitucional en Armas, resistió, al lado de su ejército glorioso, el ataque cruel y despiadado de las tropas invasoras norteamericanas evitando que pudieran tomar a Ciudad Nueva, espacio de honor que ocupaban los constitucionalistas, para defender lo más sagrado de un pueblo: ¡Su soberanía Nacional!
Ese mismo Coronel fue aquel comandante que traspasó los límites humanos de la cordura, la templanza y el valor, para resistir, junto a su tropa, aquel asalto traicionero e infernal al Hotel Matum en la mañana del 19 de diciembre de aquel inolvidable año de 1965.¡Qué valor de leyenda señores!
Un día como hoy fue fusilado en la loma de Mono mojaó, fue un soldado que preparó una expedición, no para combatir un gobierno democrático como se ha querido decir, sino para combatir una dictadura enmascarada de legalidad.
Ese gobierno que existía el 2 de febrero cuando Caamaño pisó tierra dominicana, era una dictadura ilustrada que había eliminado miles de jóvenes y adultos que lucharon por la libertad, la paz y la democracia dominicana.
Con su muerte física Caamaño Deñó dejó un legado inmortal a todos los dominicanos y las generaciones por venir.
Que nadie se engañe, Caamaño, su ejemplo, coraje, arrojo y dignidad hoy más que nunca viven en el corazón de los buenos dominicanos que aman y veneran esta patria nuestra.
¡Loor a la memoria del coronel de abril y los mártires que con el cayeron¡.